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MULA

Banda de noise-prog

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Antes de morir, el poeta y músico Chris Cornell declaró que, quizá, la sinceridad es el nuevo punk. La ruptura propuesta por la música de MULA hace honor a su nombre; la mula, como un híbrido o un medio, entre el ruidismo, la electroacústica, el free-jazz y el contrabando de antipoesías sonoras y metal, cuya sinceridad recae en el riesgo que esta agrupación bogotana decide como poética. 

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Entre la ironía y la provocación, la mezcolanza de MULA incluye sampleos en neerlandés y español, grabaciones de campo, salpicones de recetas de guacamole (“el guacamole sin ají es como hacer el amor sin ganas”), versos del creador de la rasqa, don Edson Velandia, y una suerte de viajes intergalácticos para transportarnos a la era del fin de la razón. 

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Las distorsiones en el trabajo de MULA reinventan los imaginarios de una serie de instrumentos, como el bajo eléctrico, el saxofón (tenor, alto y barítono), el clarinete, la guitarra eléctrica, la batería y teclados, cuyas intervenciones desfragmentan nuestras obsesiones y ataraxias.   

En el universo de MULA también participan músicos invitados y artistas visuales que hacen que cada elemento de sus ediciones sean coleccionables, por ejemplo, su MULA y MULB, casete de su primera producción, De carga pesada y patada fina (Festina Lente-Matik Matik, 2013), cuyo disco compacto juega con la visión de una TV análoga. 

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Poco a poco, el ruido visual y estético se encuentra con un curandero sonido, antiséptico y antipruriginoso material, lanzado en 2015, de la mano de Festina Lente Discos; producción compartida con Animales blancos, para dar una pequeña muestra de la labor colaborativa de este grupo de artistas bogotanos que, desde hace tiempo, entendieron que la fórmula radica en la amistad. 

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Del furor de la mímica corporal de Sobandero, la banda de noise-jazz de Chapinero, da un salto cuántico con resiliente (Matik Matik, 2017), en el que es notorio un homenaje al bajista Humberto Monroy y ese tema tan actual de “Si la guerra es buen negocio, invierte a tus hijos”, contenido En el maravilloso mundo de Ingesón (1968); pero también, como MULA lo sugiere, guiños a la melancolía de Supersilent, Swans, Behemoth, Sonic Youth, José José y Diomedes Díaz. Hay un impasse en el que en colaboración con Poil, agrupación francesa, dio como resultado en 2018 el disco Mula PoiL, para concluir con Matasesos (In-correcto) y su mas recientes discos el EP : Duermevela (In-correcto 2023) y Cúmulo Abierto (La Milagrosa 2024), una suerte de susurros emancipados, anti monárquicos, anti patriarcales, anti estéticos y anti conformistas que, en el mapeo de las bandas de la región latinoamericana, representan un radical y urgente acento para repensar-nos, a contra pelo, desde el baile, sus temblores y las frágiles neurosis sociales que las músicas creativas combaten con su crudeza y sinceridad.

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¡Larga vida a MULA!

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(texto por Zazil Collins)

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Integrantes:

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Juan Ignacio Arbaíza: Saxo Tenor

Camilo Bartelsman: Batería

Santiago Botero: bajo y voz

María Valencia: Saxo alto
Kike Mendoza: Guitarra

Pablo Muñoz: Saxo Baritono, Tenor y Alto

Diego Herrera: programaciones, video y sintetizadores

 

Alejandro Araújo: Ingeniería de sonido

Daniel Correa: Sonido en vivo

Julian García: Visuales e Instalaciones

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